jueves, mayo 23, 2013

Los topos



"Los hombres son todos distintos, aunque compartan la misma fe"

Los topos de Eduardo Liendo no es solo una historia sobre la guerrilla en Venezuela durante los años sesenta, sino también es el testimonio de una nostalgia colectiva y de unos sueños aplastados, en parte, por los mismos soñadores. 
La historia se centra en Armando y sus compañeros de lucha quieren destituir el sistema establecido y consolidar uno completamente diferente, revolucionario. La historia se desarrolla en tres escenarios distintos que brindan varias visiones de la vida del protagonista.  
El primero se enfoca en la vida en la cárcel. Armando y sus compañeros, quienes están presos por sus actividades guerrilleras, deben asumir con paciencia y dignidad las vejaciones a las que se ven sometidos por algunos carceleros y por la misma dinámica del lugar. Sin embargo, no se resignan: han estado en varias cárceles y en todas han buscado la manera de escapar. Algunos lo han logrado y por eso los demás no pierden la esperanza. De tanto estar en túneles, sucios de tierra, abrigados por la oscuridad y amenazados por la falta de aire, estos hombres emprenden la labor de topos pues es su única esperanza de conseguir la libertad.
En el segundo se describe la vida en un campamento guerrillero en la montaña y la imposibilidad de algunos para adaptarse a ella. Aunque todos están dispuestos a pelear y morir por la causa, pocos soportan las inclemencias del clima, los zarpazos del hambre y la falta de sueño. Aunque hay deseos de gloria y aspiraciones heroicas, el fracaso se anticipa inevitable.
Una tercera visión nos acerca a un Armando que ya no está en la cárcel, que recuerda con nostalgia su pasado guerrillero y que escribe sus vivencias aunque no sepa con exactitud porque lo está haciendo. Lo aclara desde el principio: “En realidad, nada me obliga a contar esta historia. Lo hago, quizá, para medio espantar algunos rebullones que siempre me rondan. Puede ser también para complacer a los muchachos que cuando me encuentran por ahí nunca se olvidan de decirme: <<¿Y por fin, cuándo vas a escribir aquella historia>>”. Ya sea por compromiso o para exorcizar demonios, él la escribe y nosotros la leemos.
Los topos es una novela testimonio. Eduardo Liendo comparte con su protagonista el pasado guerrillero y los años en la cárcel. En realidad nos está contando gran parte de su historia y, aunque no es posible saber qué sucedió en la realidad y qué es producto de la ficción, da la impresión de que es mayormente  un relato verídico al que solo se le han cambiado algunos nombres.
Ésta es una obra que todos los venezolanos deberíamos leer para comprender el momento actual que vivimos. Los topos brinda pistas sobre una época que está teniendo consecuencias en la actualidad. Nuestro presente, de alguna manera, ya estaba escrito. Hay un fragmento de esta obra, escrita en 1975, que no puedo dejar de transcribir y que parece una predicción: “Pienso que del vientre del mar surgirán muchas olas, algunas de ellas, nadie sabe cuándo, será lo suficientemente poderosa como para saltar el gran rompeolas de la burguesía y llegar a la playa. Ojalá que sea una hermosa revolución. Ojalá no haya entonces ninguna razón para añorar un pasado injusto e imperfecto”.



Joanna Ruiz Méndez

miércoles, mayo 15, 2013

Tres datos para lectores

1) En estos días hice un gran descubrimiento: la Biblioteca Ayacucho Digital. Con esta iniciativa, la editorial pone al alcance de los internautas grandes obras de la literatura latinoamericana en formato PDF. Se consiguen obras de Teresa de la Parra, Horacio Quiroga, Gabriela Mistral, César Vallejo y Rubén Darío, entre otros autores. Imperdible.

2) También en estos días descubrí la página de Jaime Jaramillo Escobar, en la que se puede conocer más sobre este poeta colombiano y disfrutar parte de su obra que, por lo que he leído hasta ahora, me ha parecido plena de fino humor, ironía y nostálgica reflexión. También he encontrado en sus libros varias frases que perduran; les transcribo un par:

"A los muertos se les puede elogiar descaradamente, porque ya no se sonrojan"

"Ser poeta es, pues, tener un dolor permanente en el costado"

3) En Caracas: la tienda Novedades El Jardín, ubicada en la estación de Metro Chacaíto, vende libros desde 10 Bs. hasta 50 Bs. -si hay algunos más caros, yo no los he visto-. No solo sus precios bajos son un motivo para visitarla; la gran variedad de títulos y autores es otro aliciente. Se consiguen obras de Carlos Fuentes, Graham Greene, Orhan Pamuk y Doris Lessing, entre otras. Los amantes de la lectura no pueden dejar de visitarla.

Joanna Ruiz Méndez

Frases que perduran


No sé si a ustedes les ha pasado, pero yo siempre encuentro en todos los libros al menos una frase que me queda resonando en la cabeza. Ya sea porque la frase en cuestión me toca una fibra o porque refleja una parte de mi historia -o de mi alma-, no la dejo pasar y trato siempre de anotarla en algún lado para que no se me escape. Aunque casi siempre son más poderosas en el contexto es que fueron escritas, aquí voy a transcribir algunas que tienen vida propia y que por alguna razón han marcado la mía.

"La literatura no es otra cosa que un sueño dirigido".
Jorge Luis Borges,
Prólogo de El informe de Brodie

"Dentro de uno existe un frío que hace que lo más próximo y lo más lejano nos quede igual de lejos".
Ingeborg Bachmann
Todo (cuento)

"La vida es espléndida no por lo que da, sino por lo que promete".
Teresa de la Parra
Las memorias de Mamá Blanca

“Y no querer hacer mal es la interpretación menos riesgosa del amor”.
Mario Benedetti
Quién de nosotros

"El que no cree en sí mismo miente siempre".
Friedrich Nietzsche
Así hablo Zaratustra

"Silencio antes de nacer. Silencio después de la muerte. La vida es puro ruido entre dos insondables silencios".
Isabel Allende
Paula

"Cada cual vive en el universo que es capaz de imaginar...".
Ami regresa
Enrique Barrios

"¿De quién es esa voz arcana en nuestro interior que relincha pidiendo acción?".
J.M. Coetzee
Tierras de poniente

"La muerte de todos empieza a los veinte años".
Carlos Fuentes
La cabeza de la hidra

“El alma, una enfermedad incurable".
Yevgeny Zamyatin
Nosotros

"No hay más Tierra Prometida que la que el hombre puede encontrar en sí mismo".
Alejo Carpentier
El siglo de las luces

"El horror siempre es verdadero".
Graham Greene
Los Comediantes

“Uno nunca termina de leer, aunque los libros se acaben, de la misma manera que uno nunca termina de vivir, aunque la muerte sea un hecho cierto”.
Roberto Bolaño
Dentista (cuento)

“¡Ah! En verdad, el placer es una canción de libertad”.
Kahlil Gibran
El Profeta

"Si no ha de ser bonita la vida, que se lo coman todo".
César Vallejo
Contra el secreto profesional

P.D.: Si ustedes también tienen sus frases, no dejen de compartirlas.

Joanna Ruiz Méndez